La mujer de 46 años lideraba una red de prostitución y una cocina de droga que operaba en La Matanza y en Capital Federal. Fue detenida junto a dos cómplices.
Las autoridades explicaron que “La madrina”, junto a “La Chilly”, de 38 años, y un hombre que actuaba de patovica, se dedicaba a prostituir mujeres en “privados” de La Matanza y en Capital Federal, y ofrecían sus servicios a través de páginas de Internet. El prostíbulo funcionaba las 24 horas del días los siete días de la semana y las explotadoras “alentaban” a las mujeres con carteles que decían: “La que mejor trabaje y cumpla horario tendrá un premio de $5000 más un regalo bien copado”.
En Ramos Mejía, los acusados habían montado una cocina de droga, principalmente de cocaína, con fines de lucro. De hecho, la investigación surgió tras la denuncia de clientes a los cuales les habían ofrecido “un combo” de drogas y sexo. Mediante conversaciones telefónicas, en caso de que el cliente quisiese un servicio sexual y cocaína, se hablaba de comprar “camisas”, y si deseaba el servicio de acompañante con marihuana, se referían a comprar “pantalones”.
Los tres operativos a cargo de la Dirección de Investigaciones contra el Crimen Organizado (División Trata de Personas) fueron llevados a cabo en Avenida San Martin al 1400 de Ramos Mejía, otro de calle Pozos al 150 de Lomas del Mirador y, finalmente en Homero al 2300 de Capital Federal. Durante los allanamientos los efectivos policiales recataron a tres víctimas de explotación sexual y secuestraron casi tres kilos de cocaína, una escopeta calibre 16 con 17 cartuchos del mismo calibre, telefonía celular, 300 profilácticos, bebidas alcohólicas, dinero en efectivo y documentación de interés para la causa.
La causa que está caratulada como “Promoción y Facilitación de la Prostitución Ley 26842 e Infracción a la Ley 23.737”, quedó a cargo de la Ayudantía Fiscal de Delitos Conexos a la trata de Personas, Pornografía infantil y Grooming, a cargo de de la Dra. Amalia Córdoba del Departamento Judicial de La Matanza.
